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lepra en la biblia
En este momento en los Vedas se puede ver la iniciativa de lepra, la iniciativa de la existencia de esta patología en Asia en tiempos muy remotos. La medicina hindú conoció la lepra auténtica y su atención médica con métodos que podemos calificar de «modernos», esto en una temporada en que aún no se tenía novedad de ella en Grecia, o al menos no existe perseverancia informe, en tanto que no hay fuentes escritas con esa antigüedad en Europa. En el Atarva-Veda y en el Manava Darma Castra, se describen los síntomas de la lepra auténtica (1500 – 500 a.C.) recomendándose distintas medidas profilácticas contra esta patología. En el Susruta Samhita (600 – cien a.C.) se cita la lepra con el nombre de Vat-Rakta, Vat-Shomita y Kushta, recomendándose para su curación el aceite de chaulmoogra. En la India se conocía desde esa enorme antigüedad la palabra kushta que abarcaba un sinnúmero de patologías cutáneas entre aquéllas que predomina la nosología de Hansen. La Iglesia de esta manera, desde un recóndito intérvalo de tiempo tomó una sección activa en promover el confort y el cuidado de los leprosos, los dos espiritual y por un tiempo.
En la Biblia la lepra es un cuadro del pecado; y observamos que se limpia en lugar de sanarla.
— Frase Cristiana (@FraseCristiana_) February 13, 2012
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El Peso De La Presencia De Dios
Naamán, tras su curación, fue un “ger toshab”, es decir, un prosélito imperfecto, habiendo recibido sólo algunos de los mandamientos; no obstante, la Mekilta pone la conversión de Naamán sobre la de Jetró. En el momento en que Naamán regresaba a su tierra, Giezi, el siervo de Eliseo, fue tras él y le pidió un talento de plata y ropajes aduciendo que habían llegado unos visitantes. Al regresar, Eliseo le recriminó su actitud y Giezi enfermó a su vez de lepra. Agradecido, regresó con su séquito a Eliseo, frente quien reconoció a Yahveh como el único Dios y solicitó la carga de 2 mulas de tierra israelita para conseguir construir un altar en su honor.
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Este acto implicaba el sacrificio de una pequeña ave limpia en un vaso de barro, aparte de madera de cedro, grana y asimismo hisopo, con lo que se aplicaría la sangre de la avecilla muerta sobre el que era leproso y se le declaraba limpio y sano. Y su hijo Jotam estaba adelante de la vivienda del rey rigiendo al pueblo de la tierra. Cuídate de una infección de lepra, para que observes aplicadamente y hagas conforme a todo lo que los curas levitas os enseñen; como les he ordenado, de esta forma cuidaréis de realizar. Por tanto, la lepra de Naamán se te pegará a ti y a tus descendientes para toda la vida.
La lepra y su concepto espiritual. Parte 1
Enero 15 /2019Estudio bíblico sobre la lepra y su significado espiritual (Primera parte).
Introducción: En la Biblia Dios emplea distintos métodos para charlar a su… https://t.co/UOeoZWzOPp
— SOY CRISTIANO EVANGELICO (@SOYCRISTIANOEVA) January 15, 2019
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lepra en la biblia
Obedeciendo el consejo de Jesús y dirigiéndose a los sacerdotes la lepra ha desaparecido de sus carnes. El sacerdote era el que decidía si la patología había desaparecido o si aun continuaba. Examinaba la piel del enfermo y observaba si se producía en ella ciertas manifestaciones descritas en el libro del Levítico, como eran las manchas oscuras. Alguna vez la lepra era solo aparente, y en realidad se debía a ciertas enfermedades cutáneas, distintas de la lepra famosa por nosotros el día de hoy. El sacerdote al testificar la curación del enfermo, lo readmitía al culto del Templo. El enfermo ya restituido se incorporaba de manera plena a la vida diaria del resto de los judíos.
Si se encontraba limpia, un sacrificio por la vivienda se llevaba a cabo precisamente la misma el efectuado por la persona. 46Y cualquier persona que entrare en aquella casa durante los días en que la mandó cerrar, será inmundo hasta la noche. 45Derribará, por tanto, la tal casa, sus piedras, sus maderos y toda la mezcla de la vivienda; y van a sacar todo fuera de la zona a ubicación inmundo. 41Y hará frotar la vivienda por la parte interior alrededor, y derramarán fuera de la ciudad, en sitio inmundo, el barro que rasparen.
Relata la lepra del hombre, la de los vestidos y la de las viviendas, y relaciona todas y cada una con el pecado (Lev , 9-17, 25). La lepra debe ser diagnosticada por el sacerdote que afirma impuro al que la sufre (Lev 13 28, 47-59, 35-36). La palabra bennu en Mesopotamia asimismo se usó para designar la lepra. Los investigadores históricos de Virchow referentes a viviendas de leprosos han por defecto el hecho que estas instituciones existían en Francia tan temprano como en el siglo siete en Verdun, Metz, Mastricht,, etcétera., y que la lepra podría aun ser esparcida. En el siglo ocho, San Othmar en Alemania y San Nicolas de Corbis en Francia, crearon viviendas para leprosos, y ciertos de estos existían en Italia. La temprana cuenta del hallazgo de casas de leprosos en Alemania, se da en los siglos ocho y nueve; en Irlanda , 869; Inglaterra, 950; España, 1007 (Málaga) y 1008 ; Escocia, 1170 ; los Países Bajos, 1147 .
Aún mucho más fundamental es visto que los leprosos no tengan la posibilidad de ser curados. La palabra que se utiliza en los evangelios para referirse al acto en el que Jesús calma a los leprosos de sus males no es curar, sino más bien adecentar. Esto señala, sin dudas, que la lepra no era considerada como una patología sino más bien como un signo de impureza y de mugre. El término espiritual de la lepra se estableció por primera vez en Levítico 14, donde Dios dio normas a Moisés sobre de qué forma conducir a los leprosos que eran sanados. En este pasaje, una liturgia de limpieza se llevaba a cabo por el sacerdote. En esta ceremonia, se usaban 2 pájaros, madera de cedro, escarlata, agua, y también hisopo.
No aguardan de él una acción, la misericordia, que pudiese mudar sus vidas para siempre. Le contemplan como a un lider mucho más entre varios como había en Palestina. No esperan que convierta sus vidas, tan solo alguna limosna con que subsistir. La traducciones contemporáneas de la Biblia al español continúan la tradición (¡y la confusión!), al traducir “zarath” y “lepra” con el término castellano lepra (RVR-60, DHH, Biblia de Jerusalén, Biblia Sudamericana, el Libro del Pueblo de Dios). Por esa razón, en Lev 14.34 se menciona a la “lepra” de las casas; es decir, la palabra “zarath”, que identifica las enfermedades de la piel, además se emplea para describir algunos problemas con las paredes de un edificio. En los cuentos evangélicos, los escritores entienden el término “lepra” como la traducción del hebreo “zarath”; esto es, la afección a la que se menciona identifica una secuencia de anomalías de la salud de la piel que tenían una fundamental implicación religiosa.
La separación de los leprosos de la gente sana era usada como medio de profilaxis o para que la impureza del perjudicado no va a llegar a los sanos. Las personas sospechosas de padecer lepra eran denunciadas a las autoridades de la ciudad, que mediante un jurado, a veces municipal en la localidad medieval. o exactamente exactamente los mismos curas en tiempos bíblicos, debían hacer un diagnostico la condición, la seguridad de la demanda y accionar en consecuencia. El jurado fue eclesiástico en muchas zonas de Europa, en otros sitios se pedía el diagnóstico de un médico que debía mandar un certificado al presunto enfermo. En Portugal a la lepra se le ha llamado alvaraz, elefancia 2 arabes, mal de San Lázaro, gangrena seca, Pida, figado, gafa, gafeira, gafem, guafem y gafidade. A los damnificados por esta patología se les llamaba elefantiacos, leprosos, gafos, lázaros, lazarinos y manetas.
4Y si en la piel de su cuerpo hubiere mancha blanca, pero que no pareciere más profunda que la piel, ni el pelo se hubiere vuelto blanco, entonces el sacerdote encerrará al llagado por siete días. Los pasos para la liturgia de purificación de la lepra están registrados en los próximos conjuntos de versículos. Lee en Levítico 14 todos estos versículos, sintetiza todos los pasos y explica de qué manera éstos enseñan el avance del pecado y del arrepentimiento.
- Derribará, por tanto, la tal casa, sus piedras, y sus maderos, y toda la mezcla de la casa; y lo va a sacar fuera de la zona á ubicación inmundo.
- Si bien es una historia de historia legendaria, no existe duda que en el instante del éxodo, la polución había afectado a los hebreos.