Los anales de Mateo 2 1 12 al descubierto

mateo 2 1 12

Y pasa que, es requisito tener los oídos interiores bien limpios para percibir la voz de Dios. El ejemplo de estos “magos” es un caso de muestra de fe y de sencillez. Y sin embargo, ven la estrella y no tardan en seguirla.

La oración del día expresa una petición de transformación. “La luz que vino a alumbrar a todas las naciones, también fue derramada en nuestros corazones. La llegada del Niño Dios es el más destacable regalo de Dios para todos nosotros”. Con la lectura de hoy miércoles, pidamos por esas intenciones de oración para hoy que deseas expresar. Escribe en los comentarios todo cuanto deseas que Dios logre ofrecerte o sanarte mediante la lectura de el día de hoy y su Palabra viva en el Evangelio de hoy 6 de enero, 2021. , escucha en este momento la reflexión pertinente a las lecturas de el día de hoy con la meditación del Santurrón Evangelio de el día de hoy Mateo 2,1-12, en audio.

Mateo 2,1

Los Magos supieron emplear esta luz de “astucia” en el momento en que, de regreso a su tierra, eligieron ir por otro camino. …nos enseñan a defendernos de la obscuridad que pretende cubrir nuestra vida. Ellos, con esta santa “astucia”, han protegido la fe.

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Él fue revelado a los ignorantes humildes, y los sabios, los pobres y los ricos. Él se descubrió a los “sabios” de un método que convenía a sus intereses y la entendimiento. Probablemente Josefo no hiciera ninguna mención de esta situación por el hecho de que no había un elevado número de niños comprometidos. El número más pequeño simplemente no llegan a los hechos.

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Jesús puede ser un niño pequeño, pero aprendemos de Mateo que Dios se encontraba a cargo. Él guía al hombre sabio con una estrella, y le advierte mucho más adelante en un sueño. Son de oriente, un signo de que el Mesías es para toda la gente, no solo para los judíos. Ellos traen regalos muy simbólicos – oro para un rey, incienso para un sacerdote y mirra para untar a los fallecidos- visiones profundas con relación a lo que María meditaba en su corazón.

• Y citados todos y cada uno de los principales sacerdotes, y los redactes del pueblo, les preguntó dónde tenía que nacer el Cristo.

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Este Niño tiene la posibilidad de tener ellos en tanto que lo reconocen como su Rey y Señor. Estos hombres, hace mucho más de 2 mil años que observaron el fenómeno de la estrella, y aún el día de hoy se aprecia este milagro. El rey Herodes, mediante estos magos, recibió asimismo una convidación de Dios para sumarse a los que adorarían al Niño. Pero el egoísmo y el estruendos del poder juntado, no le dejaron percibir. Tenían fe y supieron saber en la luz de esa estrella enana el paso de Dios por sus vidas.

Jesús, vengo a este rato de meditación para contemplarte y adorarte, como esos magos de Oriente. Esos magos le llevaron unos regalos al Niño Dios, pero no se percataron de que ellos fueron quienes recibieron el mayor obsequio. El hombre sabio prosiguió la estrella y la prosiguió todo el tiempo. ¿Qué estrella es la que soy llamado a continuar este año? ¿Qué regalos de mi cofre de recursos le ofreceré en servicio por su misión? Señor, envíame cada día para ser un portador de tu amor a todos los que halle.

«ld y averiguad esmeradamente qué hay del niño y, en el momento en que lo encontréis, avisadme, para ir yo asimismo a adorarlo». Al darse cuenta el rey Herodes, se sobresaltó y toda Jerusalén con él; convocó a los sumos curas y a los redactes del país, y les preguntó dónde tenia que nacer el Mesías. —Id y averiguad cuidadosamente qué hay del niño y, en el instante en que lo encontréis, avisadme, para ir yo asimismo a adorarlo. Y entrando en la vivienda, vieron al niño con su madre María, y postrándose, le adoraron; y abriendo sus bienes, le ofrecieron dones, oro, é incienso y mirra.

El guía a los hombres sabios por la estrella y los alegra en un sueño. Una vez que Jesús nació en Belén de Judea en tiempos del rey Herodes, llegaron a Jerusalén unos sabios procedentes del Oriente. Conque se levantó José, tomó al niño y a su madre, y regresó a la tierra de Israel. Entonces, advertidos en sueños de que no volviesen a Herodes, retornaron a su tierra por otro sendero. Luego Herodes llamó en secreto a los sabios y se enteró por ellos del tiempo exacto en que había aparecido la estrella.

De este modo escaparon al sopor de la noche de todo el mundo, retomaron su camino y de repente vieron nuevamente la estrella, y el Evangelio asegura que se llenaron de “colosal alegría”. Esa estrella que no se veía en la oscuridad de la mundanidad de aquel palacio. La vida está de cuando en cuando llena de cuestiones y de búsquedas. Ruego pues yo siempre y en todo instante logre buscar la verdad, y que pueda reconocerla en el instante en que Dios la pone en mi sendero. Los magos, tres astrólogos peregrinos del este, prosiguieron una estrella en pos de lo divino.

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