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clama a mi y yo te respondere
Jeremías fue encerrado en prisión y el Señor se le apareció para aconsejarlo a que clamara desde la prisión. Se encontraba en prisión por mencionarle al rey Sedequías exactamente lo que Dios le había pedido. Dios le hace una promesa al Profeta, que para este tiempo está viva. Dios desea que te apropies de ella, y recibas lo que Él tiene para ti. En este pasaje bíblico Dios nos proporciona una robusta clave para clamar y recibir una contestación.
Dios habló palabra de promesa al corazón de Jeremías en la mitad de una situación desesperante. Y Dios le aseguró que todavía haría gigantes cosas en su historia y en medio de su pueblo. Que en la mitad de esa circunstancia difícil que estas viviendo Dios te dice clama a mí, desahógate en mi presencia, echa toda tu carga sobre mi y yo te responderé.
Vida Eterna:
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Que tú no conoces.Es verdad recurrentemente no tenemos ni la menor idea de los planes de Dios. Entonces nos dice que si le clamamos el va a hacer grandes milagros en nuestras vidas y nos mostrará cosas enormes que no contamos ni la más mínima iniciativa de lo que va a ser por el hecho de que no las conocemos. El justo no se altera, sabiendo que por muy difícil que parezca una situación aflictiva, jamás va a poder ser tan fuerte para socavar su fe en Dios. Jeremías estaba deprimido en el patio de la prisión en la situación mucho más penosa en el momento en que escuchó las expresiones de Dios, “Clama a Mí y yo te responderé”.
Dios Padre:
Esta es la expresión que define lo que es la oración, con lo que Dios nos concederá lo que requerimos. Es requisito saber estos datos pues ellos nos revelan que si bien bastante tiempo pasó, el planeta está en más o menos exactamente la misma condición de ese entonces. Con cada día que pasa, el mundo elige abrazar la maldad, en vez de aceptar la realidad de Dios, y es exactamente por eso que hoy en día vemos la inmoralidad, la perversión, y la corrupción florecer y extenderse.
Conque manteniendo estos datos en mente, prosigamos en este momento con nuestro estudio de el día de hoy. Jeremías le ministró a este pueblo por un periodo de sobra de 40 años, y le tocó vivir durante lo que serían los últimos días del reino de Judá. En este punto de la historia, Jerusalén , tenía un bloqueo militar a su alrededor; tenían al ejército de Babilonia a las puertas. El ejército babilonio había negado la ciudad con su poder militar, y este bloqueo había durado por un intérvalo de tiempo de precisamente un par de años. En numerosas ocasiones hablamos acerca de la importancia de la oración. Como todos entendemos la oración es al arma de todo fiel, puesto que en el momento en que oramos no estamos en dependencia de nuestra fuerza para generar una victoria, sino nos encontramos en dependencia del Todopoderoso para que sea Él quien nos guíe mediante una situación.
clama a mi y yo te respondere
Hoy Dios desea exhibirnos cosas enormes y capaces que están libres pero solo es ligado de nosotros, de nuestra búsqueda continua por su presencia. Ese lamento que mueve el corazón del Padre hace que te muestre cosas enormes que tienen relación con su Reino, para conocer lo que esta en su corazón y tiene para ti. En el momento en que clamamos al Señor, debemos poner nuestra mente en la búsqueda de la realidad. Es comprensible solicitarle a Dios una cierta respuesta que deseamos, pero aprendamos a buscar su mejor contestación. Si al principio la contestación no llega de manera rápida, se tolerante, y confía que va a llegar. Dios fue fiel siempre y en todo momento y en todo instante y no es hombre para engañar.
Y va a suceder que antes que ellos clamen, yo responderé; aún van a estar comentando, y yo habré oído.
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La primera cosa que debemos saber es que el libro de Jeremías no fue escrito cronológicamente, conque ordenar todo lo encontrado en el contenido histórico exacto, es algo problemático en los hechos nacionales y políticos. Segundo debemos comprender que durante la vida del profeta el pueblo de Dios estaba dividido en 2 reinos; Israel era el reino del norte, y Judá el reino del sur. Dios es un Dios de diseños, de misterios y su Reino no es de este planeta, así lo manifestó Jesús, ya que, ese Reino está libre para nosotros en la medida que procuremos siempre y en todo momento la presencia de Dios.
Pero lo que no tenemos la posibilidad de olvidar, y que debemos sostenerse muy siendo conscientes de ello, es que proceder a la contra de la intención de Dios voluntaria, y deliberadamente, producirá consecuencias increíblemente negativas en nuestra vida. Este fue la situacion con el pueblo en ese entonces. A lo largo de este momento en la vida del profeta, el reino del norte había sido destruido y llevado cautivo por Asiria. Así que a Jeremías le tocó vivir por unos momentos bien bien difíciles; a él no únicamente le tocó ver la destrucción de Israel, a él asimismo le tocó ver como el remanente del pueblo de Dios le daba la espalda a Jehová. Digo esto por el hecho de que eran tiempos en el instante en que la apostasía, la idolatría, y los rituales paganos florecían. La maldad había tomado raíz, y el pueblo de Dios se alejaba considerablemente más de Él con cada día que pasaba .
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Gracias por esa palabra de dirección y aliento precisa para esta etapa de mi vida. El secreto para abrir la puerta de todo el mundo de Dios y desplazar su mano es clamando. No es un clamor común y corriente, ferviente, con gemidos, el que clama con todo anhelo. Esta clase de lamento es el que conmueve a Dios y el que lo desplaza para mostrarnos la contestación secreta que sobrepasa en enorme forma nuestros pensamientos y entendimientos. “Y yo te responderé” Sin lugar a dudas, algunos se temen que se le invoca o que han llamado y no hubo contestación. Pero cree en estas expresiones aquí, “yo te responderé”.
- Como todos entendemos la oración es al arma de todo fiel, ya que en el momento en que oramos no estamos dependiendo de nuestra propia fuerza para generar una victoria, sino más bien estamos en dependencia del Todopoderoso para que sea Él quien nos guíe a través de una situación.
- Marcando de esta manera la diferencia en este mar de la humanidad para el que clama, que lo que ocurre, le duele, le molesta, no le agrada y no la acepta.