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Debemos admitir a Cristo, debemos solicitarle perdón por todos nuestros fallos. Jesús es fiel y justo para perdonarnos y brindarnos la vida eterna. Versículo 25 nos comunica que Josué hizo un pacto con la gente. Quizá sería mucho más exacto decir que Josué negoció un pacto entre los israelitas y Yahvé – persuadiendo a la multitud para que se comprometiese a las espléndidas condiciones que Yahvé había ya establecido. Más allá de que la multitud aceptó su deber en presencia de Josué, su obligación no está con Josué, que próximamente morirá, sino con Yahvé.
Y enterraron en Siquem los ahuesos de José que los hijos de Israel habían traído de Egipto, en bla parte del campo que Jacob adquirió de los hijos de Hamor, padre de Siquem, por cien monedas; y vino a ser heredad de los hijos de José. Y pasó que envió Josué al pueblo, cada uno de ellos a su heredad. Y escribió Josué estas expresiones en el libro de la ley de Dios; y tomando una gran piedra, la colocó allí debajo de una encina que se encontraba al lado del santuario de Jehová. Entonces Josué hizo convenio con el pueblo aquel mismo día, y les dio aestatutos y decretos en Siquem. Y les di la tierra por la que no trabajasteis, y las ciudades que no edificasteis, en las que moráis; y coméis de las viñas y de los olivares que no plantasteis, coméis.
Josué 24:15 La Biblia De Las Américas (lbla)
Lograron hallar todo lo mencionado por el hecho de que Josué se sostuvo leal a Dios, y confiaba en Su palabra. Esto todo nos conduce precisamente a este punto de la historia. Estos versículos que nos encontramos empleando en hoy forman una parte del alegato final de Josué. Y la crueldad y los conflictos armados, alimentadas por animosidades raciales, étnicas, o religiosas, siguen desenfrenadamente cerca del mundo. Ahora mismo el interrogante que debemos hacernos es; ¿qué podemos hacer nosotros ante todas estas cosas que están aconteciendo? El matrimonio, (institución sagrada ), ya no es respetado, llegamos a un punto de depravación moral tan colosal, que en la actualidad, el matrimonio entre parejas del mismo sexo se transformó en algo habitual y común.
Sé que afirmas en tu Palabra que enviarás mis errores a lo profundo del mar. Si de momento no desea vivir con un vacío en su corazón; prefiera a Jesucristo, da igual lo que cueste. Voy a solicitarle ahora que le entregue su vida a Dios.
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- En otras expresiones, no podemos considerarnos cristianos si únicamente oramos en el momento en que llegamos a la iglesia.
- Si no quieren serle obedientes, resuelvan hoy a quién van a dedicar su historia.
No hay giro a la derecha ni a la izquierda – no hay ídolos ocultos para alabanza segrega – no hay coaliciones más allá de la alianza a Yahvé y no hay alianzas que se interpongan con su alianza a Yahvé. Si no desean serle obedientes, resuelvan hoy a quién van a dedicar su crónica. Deberán seleccionar entre los dioses a quienes sus ancestros adoraron en Mesopotamia, y los dioses de los amorreos en cuyo territorio ustedes viven ahora mismo. Pero mi familia y yo decidimos dedicar nuestra vida a nuestro Dios.
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En particular, recuerdan el Éxodo y su largo sendero por el desierto. Yahvé les ha sido leal previamente y de ahí que tienen argumentos para confiar en él mucho más adelante. Aquí Josué ejercita un principio escencial de liderazgo – asesorar por servirnos de un ejemplo. Él y su familia probarán con su historia personal que eligieron ser útil a Yahvé.
Curas y levitas son beatos por el hecho de que Dios los ha designado para su servicio. La palabra ’emet significa “verdad” y “lealtad.” Verdad y lealtad son características de Dios, de ahí que la gente de Dios debe manifestar estas virtudes. Si bien verdad y lealtad son diferentes, sí están similares. Una persona leal no solo afirmará la realidad, sino que asimismo llevará una vida verídica – una vida que sigue un camino recto y estrecho en lugar de someterse a cada capricho o tentación. La persona que tiene ’emet se mantendrá estable – inmutable. Estos versículos prosiguen con el repaso histórico que comenzó en versículo 2.
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Y Jehová expulsó de enfrente de nosotros a todos y cada uno de los pueblos, y aun al amorreo que habitaba en la tierra; nosotros, ya que, también serviremos a Jehová, pues él es nuestro Dios. 18 Aparte de esto, el Señor expulsó enfrente de nosotros a todos esos pueblos y a los amorreos que habitaban en el país. Por eso, también nosotros serviremos al Señor, ya que él es nuestro Dios”. 14 Por lo tanto, teman al Señor y sírvanlo con integridad y lealtad; dejen de lado a los dioses que sirvieron sus antepasados del otro lado del Río y en Egipto, y sirvan al Señor. Pero les digo en hoy que hoy en día hay dioses en los hogares de muchos creyentes. Quizás algunos comenten, bueno pastor eso no es conmigo, yo no tengo nada de eso en mi casa.
Al llevarlo a cabo, aguardan ser útil de ejemplo para los titubeantes y acercarles a Yahvé. Aguardan poder influenciar a toda la nación de Israel con su ejemplo. El próximo versículo sugiere que tendrán éxito – si bien comprendemos por los hechos que vinieron después en la historia hebrea que esta gente resultará antojadiza y con frecuencia infiel.
Relata como Yahvé concedió victorias a los israelitas sobre los amorreos, ferezeos, cananeos, heteos, gergeseos, heveos y jebuseos. Yahvé afirma, “y yo los entregué en vuestras manos” (v. 11). Yahvé termina este repaso diciendo, “les di la tierra por la que nada trabajasteis, y las ciudades que no edificasteis, en las cuales moráis; y de las viñas y olivares que no plantasteis, coméis” (v. 13). “y aumenté su descendencia, y le di Isaac” (v. 3b). La historia del nacimiento de Isaac es muy familiar, entonces lo recontaré en breves expresiones. Abraham y Sara no tuvieron un hijo hasta el día de hoy en que ahora eran muy mayores.